8 cosas que quizás no sepas sobre el síndrome de piernas inquietas

8 cosas que quizás no sepas sobre el síndrome de piernas inquietas

agosto 30, 2022 0 Por RenzoC

Conoces la agonía de las noches de insomnio si tienes el síndrome de piernas inquietas. Tu pareja puede quejarse de que le das patadas mientras duerme y, sin duda, te despiertas varias veces, lo que dificulta cumplir con tu cuota de sueño.

Sin embargo, muchas personas no entienden mucho acerca de este trastorno. Incluso aquellos que lo hacen pueden descubrir nuevos hechos sorprendentes. Aquí hay ocho cosas que quizás no sepa sobre el síndrome de piernas inquietas.

1. Existe una asociación con las venas varicosas

El síndrome de piernas inquietas afecta al 7-10% de la población estadounidense. El trastorno ocurre en ambos sexos, aunque las mujeres son ligeramente más propensas a sufrirlo que los hombres.

Una de las razones de la disparidad de género puede residir en la asociación entre esta condición y las venas varicosas, otro trastorno que afecta típicamente al sexo femenino. Muchos pacientes a los que se les extirparon las venas varicosas informaron que sus síntomas de RLS cesaron después de la cirugía.

Los dos comparten muchos de los mismos síntomas, aunque los científicos deben realizar más investigaciones para discernir la naturaleza precisa del vínculo.

2. Viene en dos sabores

RLS viene en dos variedades: primaria y secundaria. El RLS primario es un trastorno neurológico que a menudo surge en la mediana edad, aunque algunas personas experimentan síntomas en la infancia que empeoran gradualmente con el tiempo. No tiene una causa conocida, aunque algunos informan que el trastorno es hereditario.

RLS secundario tiene una causa identificable. Puede provenir de daño a los nervios, anemia o deficiencia de nutrientes, enfermedad renal o una condición comórbida como la artritis reumatoide o la enfermedad de Parkinson.

3. Ciertos medicamentos pueden causarlo

Si su RLS se desarrolló después de que comenzó un nuevo régimen de medicamentos, es hora de hablar con su médico. Ciertos medicamentos recetados y de venta libre pueden estimular o agravar los síntomas, y discutir alternativas podría resultar en un alivio. En particular, tenga cuidado con los siguientes tipos de drogas:

  • Medicamentos contra las náuseas – Proclorperazina y metoclopramida.
  • Medicamentos antipsicóticos – Haloperidol o derivados de la fenotiazina.
  • Algunos antidepresivos – Ojo con los que afectan a la serotonina, como la fluoxetina o la sertralina.
  • Antihistamínicos más antiguos – Particularmente difenhidramina.

4. El embarazo puede estimular o empeorar los síntomas

¿Comenzaron sus síntomas después de descubrir que tenía un bebé a bordo? Si es así, es posible que tenga SPI inducido por el embarazo. Es una de las causas más comunes de insomnio entre las mujeres.

Dos nutrientes críticos asociados con RLS son el ácido fólico y el hierro. Ambos se agotan con el embarazo y las futuras mamás necesitan ácido fólico adicional para evitar defectos del tubo neural en sus recién nacidos. Otros investigadores teorizan que el aumento de los niveles de estrógeno durante el embarazo puede contribuir al desarrollo de la afección.

5. Existe una asociación con la enfermedad de Parkinson y la AR

Los médicos sospechan que la dopamina juega un papel fundamental en el SPI. Eso se debe a que usan los mismos medicamentos para tratar el RLS que usan para los pacientes con enfermedad de Parkinson. Sin embargo, los médicos deben tener precaución al prescribir medicamentos porque algunos medicamentos dopaminérgicos pueden aumentar los síntomas y hacer que aparezcan más temprano en el día o en las extremidades superiores.

Los investigadores siguen sin estar seguros del vínculo exacto entre la artritis reumatoide y el SPI. Sin embargo, aproximadamente el 30% de los pacientes con AR también tienen SPI comórbido. Los científicos creen que la correlación puede provenir de la respuesta del sistema inmunitario, ya que libera citoquinas durante el sueño.

6. Las lesiones de la médula espinal pueden contribuir

El daño a los nervios puede desencadenar RLS, incluido el daño a la médula espinal. Tales lesiones pueden surgir de traumatismos, infecciones, enfermedades autoinmunes, enfermedades inflamatorias, degeneración de la columna, anomalías congénitas o tumores.

El daño a los nervios interfiere con las señales entre el cerebro y las piernas. Los cables podrían cruzarse, provocando fallos de encendido en el momento equivocado y haciendo que quieras moverte cuando deberías estar durmiendo.

7. Podría ser un signo de problemas renales

El RLS es más común en personas con enfermedad renal crónica. Es particularmente frecuente en aquellos sometidos a hemodiálisis.

Muchos factores empeoran los síntomas de las personas con enfermedad renal. Son más propensos a la anemia o a niveles elevados de calcio en la sangre, que contribuyen al trastorno.

8. Es posible que necesite aumentar su consumo de hierro

El factor ambiental más frecuente que contribuye al RLS es la anemia por deficiencia de hierro. El alcoholismo, las enfermedades de la sangre y los trastornos autoinmunes pueden contribuir a este problema, al igual que una dieta deficiente. Los pacientes con deficiencia de hierro tratados con un suplemento a menudo mejoran, consolidando el vínculo en la mente de los investigadores.

Puede intentar automedicarse con un suplemento de hierro si experimenta síntomas y tiene problemas para ver a un médico. Sin embargo, tenga cuidado, especialmente cuando los tome con el estómago vacío. Pueden causar náuseas y vómitos en algunas personas. Lo mejor es tomar su comprimido con una pequeña cantidad de comida, aunque debe evitar los lácteos, que dificultan la absorción.

Cosas que quizás no sepas sobre RLS

El síndrome de piernas inquietas no se comprende completamente. Sin embargo, causa un sufrimiento considerable a muchos. Ahora que comprende varias cosas que quizás no sabía sobre el RLS, puede tomar medidas para prevenirlo o tratarlo. Hable con su médico y considere un suplemento de hierro.