
Cómo todos podemos aprender a vivir con COVID
agosto 19, 2021Inicialmente, muchos de nosotros creíamos que la pandemia de COVID-19 duraría solo unos meses. A medida que pasaban los meses, se volvía cada vez menos claro cuánto duraría la pandemia y cómo el virus podría alterar nuestras vidas de forma permanente.
Parece que es posible que debamos aprender a vivir con COVID-19 por el momento, pero la buena noticia es que la infraestructura y los recursos se han desarrollado para ayudarnos a manejar nuestra nueva normalidad.
¿Una nueva normalidad?
COVID-19 aún es nuevo y no sabemos con precisión qué sucederá. Existe la posibilidad de que podamos vacunar eficazmente a una cantidad suficiente de la población mundial para que el virus se disipe en gran medida, como ocurre con la difteria y la poliomielitis. Los virus y enfermedades como la difteria y la poliomielitis siguen apareciendo aquí y allá, pero, en su mayor parte, se han erradicado en todo el mundo.
Por otro lado, COVID-19 puede ser una nueva gripe para la cual las personas reciben vacunas anuales. Si eso es lo que sucede, es probable que solo las personas en ciertas partes del mundo tengan acceso a las vacunas de refuerzo anuales, y el virus podría continuar ejerciendo presión sobre los sistemas de salud en otros países.
Nuevas precauciones de seguridad
Uno de los aspectos tranquilizadores de lidiar con COVID-19 es el hecho de que ahora hay muchos recursos diferentes disponibles para lidiar con vivir con el virus. La prueba COVID-19 eficiente es uno de los nuevos procedimientos de seguridad más efectivos y cruciales, y es extremadamente útil para reducir la transmisión a través de seguimiento y rastreo.
Todos los destinos de viaje, trabajos, eventos y roles específicos requieren pruebas COVID-19. En el pasado, era muy difícil encontrar un proveedor de pruebas confiable, eficiente y rentable en el que pudiera confiar. Sin embargo, ahora hay muchos proveedores diferentes en los que se puede confiar para realizar pruebas de COVID-19 eficientes y efectivas.
Otras precauciones de seguridad y tecnología también han avanzado drásticamente en el transcurso del último año y medio. Las máscaras, los dispositivos de filtración de aire y la tecnología de saneamiento se han vuelto más baratos y más efectivos.
A medida que COVID-19 se convierta en parte de nuestro futuro a largo plazo, todos necesitaremos confiar en esta tecnología en el futuro y sentirnos cómodos con avances tecnológicos e innovaciones similares en el futuro. Eso es especialmente cierto con respecto a las vacunas y las inyecciones de refuerzo, ya que es probable que las necesitemos con regularidad.
Mirando hacia los próximos años
En este momento, las restricciones de propiedad intelectual de muchas de las vacunas más efectivas permanecen protegidas. Como resultado, los costos de fabricación de las vacunas son prohibitivamente altos para muchos otros países menos desarrollados. Si se suavizaran las restricciones a la propiedad intelectual, o PI, países como India y China podrían producir fácilmente las vacunas en masa debido a sus capacidades superiores de fabricación de productos farmacéuticos.
En la actualidad, las restricciones de propiedad intelectual siguen vigentes, la producción de vacunas de alta calidad es costosa y muchos países aún carecen de acceso. Hasta que haya una vacunación masiva, es probable que el virus continúe mutando y todos necesitaremos inyecciones de refuerzo anuales para hacer frente a los cambios.